El Meridiano 0 (MA y PA no lineales en 34)



Cuando LO QUE ES, lo que surge de mí, es algo que percibimos erróneo, que no encaja en el contexto, este comportamiento no va a encontrar un lugar en el que pueda acomodarse. De modo que la tendencia automática es la de no utilizarlo. La espontaneidad es algo que el modelo de comportamiento social no sabe cómo encajar, porque no se acomoda a los patrones que cumplen con un protocolo que tiene en cuenta las “heridas” humanas.

A medida que yo me castro mi propia espontaneidad, voy a castrar la de otros, porque primó en mis finalidades la de acomodarme al contexto. La inclusión de la espontaneidad pasa por permitirme sentir vergüenza. Las personas no suelen estar dispuestas a exponerse a la vergüenza y el ridículo, y esto les anula la espontaneidad, la creatividad.

El espontáneo, el creativo, va a romper los moldes de las FORMAS, porque le prima el FONDO, el potencial que expresa.

¿Cómo se puede ir acomodando que sea incluido el potencial sin arrasar por completo con las formas, sin que acabe destruyendo al humano y su herida?

Digamos que las FORMAS, las estructuras de comportamiento que conocemos, que hemos creado para relacionarnos entre nosotros, están sustentadas en premio-castigo, herida, culpa, me ofendes-te ofendo... etc. Una estructura de diseño que nos conecta a través de VALORES, es una estructura muy arcaica, que se va a sentir herida a cada potencial del futuro que entra a integrar nuevas VALENCIAS de enlace entre unos y otros, porque estos potenciales no saben de FORMAS, sino de plantar en tierra el potencial, sembrarlo, pues es la finalidad con la que ha sido “despertado”. Cuando decimos que 91 es condición, es porque es determinante, la finalidad dentro del plano físico y biológico. El espermatozoide cuya finalidad no florece si no se planta en algún óvulo, y que busca sí o sí, ese ovulo. El femenino, entonces, puede sentirse herido con aquella entrada del nuevo potencial que no contempla las FORMAS, lo LEGAL. Digamos que el masculino del futuro entra como un elefante en una cacharrería.

Los valores han buscado domesticar la espontaneidad, porque al no ser comprendida como creatividad, como introducción de nuevos potenciales, ha sido vista como violencia, puesto que no tenía en cuenta las formas.

El femenino, la izquierda, en lugar de dudar de las formas existentes, del diseño existente,  ha tenido la tendencia a sustentarse en su razón, y el violento, realmente, le va a dar la razón más insistentemente. “El otro no sabe comportarse. Hace las cosas mal...etc. Me hiere...”

En mi opinión, es realmente dificil que lo LEGAL comprenda la sensibilidad de lo creativo y lo espontaneo, lo LEGÍTIMO que viene desde el CAOS, y no trae ningún orden de formas. Por otro lado, los VALORES que tratan de integrar, se quedan muy cortos, y lo que hacen es JUSTIFICAR al legítimo, justificar sus errores para que no sean condenados por lo LEGAL.

La integración del error que va a portar el legítimo mientras se muestra como un meteorito abriendo un potencial nuevo, me resulta clave en estos instantes. ¿Qué hago con mis propios errores? ¿Cómo los manejo? ¿Les aplico el artículo 155 (condena legal), los JUSTIFICO, los trato con valores?

Porque mi creatividad original se va a expresar, necesariamente, a través del error, y si no puedo integrar mis errores, voy a coartarme la creatividad. Al mismo tiempo, el potencial que otros me abren, también puede venir, desde el futuro, arrasando las formas conocidas, y causando heridas en mi izquierda. Ocasión para detectar la distorsión sobre la que está sostenida mi propia LEGALIDAD, mis parámetros sobre las formas que sí puedo integrar y aceptar, y las que no. Ocasión para permitir que se reparametrice mi propio sistema de valores.

Cada METEORITO de potenciales nuevos, entonces, me va a hacer saltar todo el programa de relaciones que considero PILAR FUNDAMENTAL de la forma en la que me relaciono con el otro. Asumir el CAOS con el que llega lo nuevo y lo desconocido, puede ser algo sumamente divertido, un juego total, si las heridas de nuestra identidad son tomadas como parte del combustible del juego mismo.

Es curioso que el meridiano 0 en la península ibérica divida una linea “ilusoria” entre España y Cataluña. La palabra meridiano, puede referirse a algo que es sumamente claro. Los meridianos son las líneas verticales que sitúan los parámetros de localización terrestre. La percepción vertical, por su parte, nos ofrece una claridad que no tenemos cuando solo tenemos mirada horizontal.

Meridiano 0, para mí, a día de hoy, me está invitando al reset para incluir esa mirada vertical desde la que el potencial que viene del futuro (PA no lineal) va a marcarme los puntos de estructuras obsoletas. También me va a marcar los puntos en los que, al tratar de JUSTIFICARLO, no le informo a ese PA no lineal, a ese inhumano, de que entra como un elefante en una cacharrería, y no tiene en cuenta los límites del humano, los puntos de dolor humano. Una MA no lineal capaz de decodificar un PA no lineal, por tanto, tiene que ser capaz de ver su error, y también el propio, el límite que tiene si solo encuentra la condena o la justificación para afrontarlo. 

La tendencia de la MA del pasado, ante el error, puede ser la de taparlo o justificarlo, mientras el aspecto masculino lo va a condenar, a imponerle el castigo que merece, para que aprenda. Ambas son las habilidades de respuesta que tenemos del pasado. No asumir la paradoja nos hace elegir a una de las dos, pero el asumir la paradoja nos invita a contemplar ambas, ver cómo salen dentro de uno y permitir que habilidades que desconozco, a través de ese meridiano 0, puedan desarrollarse en mi propio receptor. 

El encuentro con esta FRONTERA de los aspectos izquierda y derecha no lineal, permite que se puedan parametrizar las lógicas con las que operan ambos. El meridiano 0, entonces, nos está apuntando, según veo ahora, a que los puntos de frontera sean operados por el vacío, en lugar de por los automáticos que vienen del pasado. 

El otro día, mi amiga Paola Patricia Ruiz me decía que, cuando hace yoga, llega hasta donde el cuerpo puede, detecta ahí su frontera, para. Me contaba también que, como en el cuerpo, la inflexibilidad del caracter puede poder ser asumida desde otra perspectiva, al asumir los límites que tenemos como humanos. Me pareció un ejemplo muy claro y práctico para comprender esto que damos paso a través del  0. Poderse detectar la inflexibilidad, el punto al que llega mi frontera, y permitir que el cero opere la situación, el vacío permite la reparametrización de la lógica (5) que necesariamente, puede incluir un potencial (6) que viene del futuro con una finalidad (9). Si me aferro a la lógica de siempre, me aferro a la herida, a que tengo razón y no se respetaron mis formas, voy a tener razón, efectivamente, pero no  no puedo reparametrizar la lógica (5) para recibir el potencial con el propósito (9) de la perspectiva de futuro.  

El meridiano 0 en este MA-PA no lineal que muestra el 34, hoy por hoy tiene una enorme muestra en la que nos está llevando a que, cada límite humano (MA no lineal) pueda ser percibido, y permitido ese 0 para su reparametrización, pues el PA no lineal trae perspectiva de futuro que precisa de una lógica en constante mutación, suelta, flexible, que pueda modificar las estructuras LEGALES que hoy por hoy, dejan completamente fuera al LEGÍTIMO y a la espontaneidad y la creatividad que trae con sus potenciales de futuro.

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